Para un diseñador, la agudeza visual es un arma fundamental. Las formas de algunos objetos sobradamente conocidos pueden ser la solución para idear una nueva y sorprendente funcionalidad.
El macetero Kikku de la marca finlandesa Tonfish, deconstruye y reinventa la forma y dimensiones de una escalera con la intención de convertirla en una estructura ideal para colocar macetas.
En sí mismo, es un macetero de varios niveles, una estructura donde colocar con mucho encanto plantas a diferentes alturas, en espacios ámplios.