En los últimos tiempos los maceteros de resina de polietileno son uno de los más demandado gracias a la resistencia de su material. La calidad de estas macetas de polietileno está garantizada tanto por la materia prima utilizada como por su proceso de fabricación.

El polietileno es un material tecnológicamente avanzado que resiste las inclemencias meteorológicas extremas, tanto las más bajas temperaturas como el exceso de sol, protegiendo siempre a la planta y sus raíces. Además, es un material muy ligero que ofrece la ventaja de transportarse sin demasiado esfuerzo.

En cuanto a su proceso de fabricación, éstos se realizan mediante un proceso denominado rotomoldeo. Este proceso se emplea para producir piezas huecas, en el que plástico en polvo o líquido se vierte dentro de un molde mientras gira en dos ejes biaxiales (dos ejes que interceptan). El plástico se va fundiendo mientras se distribuye y adhiere en toda la superficie interna. Finalmente el molde se enfría para permitir la extracción de la pieza terminada. Como se puede entender, el proceso para realizar maceteros de grandes dimensiones puede durar bastante tiempo.

Sin embargo, los resultados tan espectaculares bien justifican ese tiempo, ya se conforma un producto muy resistente y rígido (prácticamente irrompible) y muy ligero. Además de estas ventajas técnicas, también conlleva ventajas estéticas respecto a otros materiales, permitiendo crear diseños y colores muy, pero que muy originales.